En los últimos años, la temática sobre la decisión no tener hijos y la renuncia a dejar descendencia se intensificó y hasta se volvió un debate global. Sin embargo, en algunos países que presentan de las tasas de natalidad más bajas del mundo, significa un riesgo y genera incertidumbre, como es el caso de Corea del Sur. Allí, las ventas vertiginosas de cochecitos para perros superaron a las de cochecitos para bebés por primera vez en la historia.

En muchas economías desarrolladas -y en las que no también-, cómo los adultos tratan a sus mascotas como niños mimados. Elegantes fiestas de cumpleaños, mansiones decoradas, viajes en aviones privados y paseos en cochecitos exclusivos son ejemplo de este nuevo hábito.
Si bien en Argentina la historia termina con adorables fotografías del momento, la problemática en el otro lado del globo significa un riesgo urgente, especialmente para los funcionarios surcoreanos, que debaten las medidas para revertir la situación.
Una economía desafiante, la principal razón
Según una nota del medio The Wall Street Journal, el país se enfrenta a una tasa nacional de fertilidad de 0,72, apenas un tercio del nivel necesario para mantener la población. En una mesa redonda de jóvenes celebrada en 2023, Kim Moon-soo, el actual ministro de Trabajo del país, sorprendió a los jóvenes asistentes con fuertes declaraciones: “Lo que me preocupa es que los jóvenes no se quieran entre sí”, dijo Kim.

“En cambio, aman a sus perros y los llevan consigo. No se casan y no tienen hijos”, expresó desde su punto de vista del problema.
Los miembros de un partido opositor le respondieron al ministro con las razones por las que los jóvenes decidían no perseguir la meta de tener una familia propia: dijeron que debería considerar las intensas condiciones de trabajo y los bajos salarios antes de culpar a los dueños de mascotas por las bajas tasas de natalidad.
Aumentan los lugares que admiten mascotas, y también las “zonas sin niños”
En una encuesta reciente, una de cada dos mujeres surcoreanas de entre 20 y 49 años dijo que no tenía intención de tener hijos, ya que lo consideraba innecesario y citaba limitaciones económicas. Si bien los lugares que admiten mascotas proliferan en todo el país, los restaurantes y cafés declaran “zonas sin niños”, lo que indica un comportamiento disruptivo.

Sin embargo, la petición del gobierno central para que las generaciones más jóvenes prefieran tener niños en lugar de mascotas llega hasta cierto punto: el presidente surcoreano, Yoon Suk Yeol, que si bien está casado, no tiene hijos pero posee en su haber al menos 10 perros y gatos.
El gran negocio en Corea del Sur: cochecitos para perros
Las ventas de cochecitos para perros se cuadruplicaron desde 2019, según informa Yoon Hyun-shin, director de Pet Friends, la plataforma de comercio electrónico de mascotas más grande de Corea del Sur. Airbuggy es aclamado como el “Mercedes-Benz” de ellos. Su modelo de edición especial de otoño-invierno “Grey Tweed” cuesta alrededor de 1.100 dólares, tiene tela escocesa y neumáticos todoterreno.

La empresa comenzó como fabricante de cochecitos para bebés, pero como todo negocio que sabe cómo perdurar en el tiempo, se adaptó a la realidad y creó una linea centrada exclusivamente en los cochecitos para perros.
“Puedes poner a tu perro o a tu bebé en nuestros cochecitos”, expresó Park Soon-jae, director de la división Airbuggy Korea. “Pero el mercado aquí demanda cochecitos para mascotas”.
Los cochecitos que transportan perros, generalmente pequeños y saludables, son parte del paisaje cotidiano en los grandes almacenes, restaurantes, aceras y áreas de recreación de Corea del Sur.
Con información de BAE Negocios