Finalmente, el oficialismo esperará el inicio de las sesiones ordinarias para votar en el Senado el ingreso de Ariel Lijo a la Corte Suprema de Justicia. En la reunión de labor parlamentaria realizada este jueves, los bloques de la oposición dejaron en claro que el Gobierno no tenía los apoyos necesarios para sesionar mañana, como se pretendía. Mucho menos para votar el pliego, que requiere el aval de dos tercios para ser aprobado.
La Casa Rosada modificó su estrategia mientras avanzaban las negociaciones. En un principio, había ordenado que los senadores del oficialismo bajaran mañana al recinto con el objetivo de exponer la ausencia de otros bloques y habilitar así la posibilidad de un nombramiento por decreto. Sin embargo, esa idea fue descartada ante la falta de respaldo en la Cámara Alta.
No hay posibilidades de quórum para el pliego de Ariel Lijo
Los libertarios se encontraron este jueves con que no solo no contaban con la presencia de los senadores de Unión por la Patria –algo previsible–, sino que los bloques dialoguistas tampoco iban a dar quórum. Ante esa situación, desistieron de llamar a sesionar mañana viernes.
Ahora resta saber si la Casa Rosada avanzará con la idea de nombrar a Lijo y a Manuel García-Mansilla por decreto. Fuentes oficiales consultadas ayer por Infobae aseguraron que en principio el presidente no avanzaría por esa vía. Es más, mencionaron a otros juristas como posibles candidatos para reemplazar las postulaciones vigentes.
“Hay entre 23 y 25 senadores nuestros que no acompañan el pliego”
El debate respecto de los candidatos a reemplazar a Elena Highton y Juan Carlos Maqueda está paralizado en la Cámara Alta. Tanto el pliego de Lijo, que ya cuenta con dictamen, como el de García-Mansilla, que aún no consiguió las firmas necesarias para avanzar, siguen sin resolución. La llave para aprobar los nombramientos está en manos de Unión por la Patria. “Hay entre 23 y 25 senadores nuestros que no acompañan el pliego”, indicó una alta fuente K del Senado. “Si el planteo es discutir qué va a pasar con la Justicia y con la Corte, si vamos a tener una ampliación del número de miembros o no, si van a entrar mujeres, etc, nosotros vamos a estar en esa discusión”.
El conflicto para el oficialismo es que no solo no cuenta con el acompañamiento de buena parte del bloque de Unión por la Patria, sino que tampoco tiene el respaldo de los bloques dialoguistas. El PRO ya había anticipado que no votaría el nombramiento de Lijo, lo que implica siete votos en contra. A esto se suman entre tres y cinco radicales de un bloque de 13 y el ya conocido rechazo del exsenador libertario Francisco Paoltroni.