Marcos Rojo atraviesa un momento de incertidumbre en Boca Juniors. El defensor, que llegó al club en 2021 y hoy es capitán, tiene contrato hasta diciembre y no existen negociaciones abiertas para renovar su vínculo. A medida que se acerca el final de la temporada, crecen las especulaciones sobre su futuro.
El rumor de un posible regreso a Estudiantes de La Plata tomó fuerza en los últimos días. Aunque Juan Sebastián Verón, presidente del Pincha, negó contactos formales, el entorno familiar del jugador alimentó la ilusión de los hinchas.
Franco Rojo, hermano del defensor, declaró en una entrevista que le gustaría verlo nuevamente en el club platense. “Puede ser, él salió de ahí. Si tiene ganas y se puede, volverá. Eso lo decide él”, afirmó Franco, quien también reconoció que los amigos y fanáticos de Estudiantes piden su vuelta.
Por el lado de Boca, la dirigencia no incluyó la renovación de Rojo entre sus prioridades. El club condiciona cualquier extensión de contrato al rendimiento que el jugador muestre en lo que resta del año. La continuidad del defensor depende de su nivel en la cancha y de las necesidades del equipo, que solo compite a nivel local y en el Mundial de Clubes en Estados Unidos.
En declaraciones recientes, Rojo admitió que no tiene decidido su futuro y que no habló con la dirigencia sobre una posible renovación. “Tengo hasta diciembre. No lo pensé ni lo charlé con nadie. Vivo el día a día y cuando llegue el momento, la decisión será rápida”, aseguró el defensor, quien también destacó su buena relación con Riquelme y el Consejo de Fútbol.
Como capitán, Rojo recibe las criticas por el mal momento de Boca
El futbolista, de 35 años, suma más de 100 partidos con la camiseta de Boca y ganó cuatro títulos desde su llegada. Sin embargo, su presente en el club se volvió más complejo tras algunas críticas de los hinchas y la falta de resultados positivos del equipo. Rojo fue silbado en La Bombonera y su nombre aparece entre los señalados en este momento de transición.
Mientras tanto, en Estudiantes la situación es diferente. El club no busca refuerzos y Verón desmintió públicamente cualquier gestión por Rojo. “Esto que hacen circular es mentira, nadie pensó ni piensa en el mercado. Estamos enfocados en los objetivos inmediatos”, publicó el presidente en sus redes sociales.
El futuro de Marcos Rojo sigue abierto. Todo indica que la decisión final dependerá tanto de su desempeño en Boca como de su voluntad personal. Por ahora, la pelota está en su campo y los rumores seguirán girando hasta que llegue el momento de definir su destino.
