Una intensa tormenta sorprendió a los vecinos de Posadas, Garupá y Candelaria el domingo al mediodía. El fenómeno dejó árboles caídos, vehículos dañados, techos rotos y cortes en el tendido eléctrico. Equipos de emergencia trabajaron en varios barrios para despejar calles y restablecer los servicios básicos.
En este marco, Ricardo Koch, director de Defensa Civil de Posadas, sostuvo a Canal Doce que la ciudad se encuentra normalizada, “pero en algunos barrios aún no hay electricidad ni otros servicios. Además, la zona oeste fue la más afectada, porque la tormenta entró por el Barrio Itaembé Guazú”.

Cabe señalar que, tras las fuertes lluvias, las reparticiones provinciales y municipales coordinaron tareas para asistir a los afectados y limpiar las zonas más dañadas. La tormenta provocó caída de árboles y postes, voladura de techos, derrumbe de estructuras y anegamientos en algunas áreas de la ciudad.
Al respecto, Koch explicó que “cuando cae un árbol, puede obstruir una calle, caer sobre un tendido eléctrico o sobre una casa, y causa mayores complicaciones”. Agregó, además, que Defensa Civil se enfocó en asistir a las familias para salir de la urgencia. “El departamento capital fue el más afectado de la provincia por la tormenta”, contó.

Cabe recordar que, según datos de la Dirección de Meteorología y Prevención de Riesgos Naturales de Posadas (Opad), las ráfagas de viento alcanzaron los 116 km/h a las 12:34, provenientes del sector sur.
Finalmente, el funcionario señaló que buscan mejorar la calidad de vida de los vecinos. “Gracias a la subsecretaría de Protección Civil, hoy entregamos colchones, frazadas, maderas, tirantes y chapas”. También mencionó que “el arroyo Vicario, Itá, San Onofre y otros juegan un papel fundamental para evitar inundaciones en Posadas”.