El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) informó que la balanza de pagos del primer trimestre de 2025 registró un déficit de cuenta corriente de u$s1.228 millones, por la salida de dólares tras un superávit de u$s1.519 millones en igual período de 2024. El dato se explica en parte por un saldo negativo de u$s4.502 millones en la balanza comercial de servicios, que marcó un récord histórico. La principal causa fue el aumento del déficit se dio en el rubro “viajes” (u$s2.755 millones), seguido por transporte (u$s407 millones), servicios financieros (u$s550 millones), empresariales (u$s445 millones) y los relacionados con telecomunicaciones, informática e información (u$s233 millones).
Francos descartó una posible devaluación por la salid de dólares
Solo dos rubros de servicios cerraron el trimestre con superávit: los servicios de gobierno, con u$s105 millones, y los de construcción, con u$s7 millones. Además, el superávit de la balanza comercial de bienes se redujo un 2,4% interanual y se ubicó en u$s3.276 millones. El documento oficial reveló un fuerte impacto del turismo emisivo y una creciente demanda de servicios externos en sectores como el digital y el corporativo.
El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, aseguró que el Gobierno “sigue atentamente” la evolución de las cuentas externas, pero descartó una devaluación. “Hay varios sectores de la economía que esperarían una acción del Gobierno para devaluar el peso, pero eso no va a pasar”, señaló. También remarcó que el dólar se seguirá moviendo “libremente” dentro del esquema de bandas cambiarias y que la Casa Rosada solo intervendrá “en el piso o en el techo”.
Un cambio importante para la política
Francos indicó que gran parte del déficit se explica por el ingreso de bienes de capital. “Argentina estaba descapitalizada y una gran parte de esos dólares que salieron son para importar bienes de capital. Si tenemos una economía en crecimiento en orden de 6% comparativamente con el año anterior, claramente ese crecimiento demanda inversiones”, sostuvo. En esa línea, vinculó el resultado de la cuenta corriente con una dinámica de inversión asociada al modelo económico vigente.
El funcionario también cuestionó las presiones de algunos sectores para forzar un ajuste cambiario. “Por más que haya sectores interesados, si existiera una devaluación volveríamos a la historia de siempre: se emitirían pesos y se terminaría otra vez en la cadena inflacionaria”, advirtió. Y reiteró que el Gobierno “no va a proceder de esa manera”.
Las declaraciones de Francos se enmarcan en la línea argumentativa del presidente Javier Milei y el secretario de Política Económica, José Luis Daza, quienes atribuyen el déficit a un proceso de transformación de la economía. Desde el Ejecutivo consideran que los datos del INDEC muestran un “cambio importante de política” más que una señal de alarma pese a la salid de dólares.
