Alumnos y profesores del instituto Inmaculada Concepción organizaron su primera feria de robótica. Los jóvenes de los niveles primario, inicial y secundario crearon diferentes proyectos que utilizan tecnología para ayudar a la comunidad.
Teniendo como referencia la Escuela de Robótica, cada vez más instituciones educativas privadas de la provincia se unen a la implementación de la materia robótica como área de acercamiento a los jóvenes. En este caso el instituto Inmaculada Concepción celebró la primera edición de Expo Robótica, en donde los estudiantes de todos los niveles presentaron los proyectos tecnológicos trabajados durante el ciclo 2023.
“Son estrategias totalmente innovadoras que seguimos viendo, pero lo más interesante es lo mucho que se involucran, el interés que presentan y la facilidad que tienen para desenvolverse en el área”, expresó la profesora organizadora del evento, Rosana Valeria Melnichuk, a Canal 12.
Por su parte la directora Nivel Inicial, Monica Silvero, aclaró que “es una hermosa experiencia, trabajar en la robótica incorporada a lo que es lo didáctico y pedagógico. Para los niños es una experiencia nueva entender que desde la robótica podemos llegar a la sociedad y mejorarla”. Además, remarcó que tanto alumnos como padres están muy interesados en la implementación de esta tecnología y en su creación.
Una muestra de innovación y robótica
Por otra parte, Melnichuk destacó que uno de los alumnos creó un robot que utiliza detectores de movimiento para localizar a los transeúntes y repetirles frases motivacionales al pasar. “Detectan movimientos y a partir de eso van a expresar determinadas palabras con las voces de los propios alumnos, como somos una institución católica las frases están ligadas a ese tema”, explicó.
Entre los trabajos presentados se encontraban también proyectos dedicados a ayudar a la comunidad y cuidar el medio ambiente, como es el caso del RiegaBot. “El agua que sobra de nuestros bebederos se desperdicia, porque toman el agua pero lo que no quieren lo tiran en un tacho. Nuestro robot mide la humedad de las plantas y la riega con esa agua, pero solo cuando lo necesite”, explicó Sebastian, uno de los alumnos de nivel primario.
Para finalizar, Silvero enfatizó en que la robótica “es un área en la que tenemos que ir de la mano con los alumnos, pero sin subestimar sus capacidades, ya que ellos lo manejan desde una temprana edad. Así que tampoco podemos estar alejados de eso, debemos encontrar la mejor manera de que estas tecnologías puedan ayudarnos y, de alguna manera, ayudar a los demás”.
