Una matrimonio bonaerense firmó un convenio con el Ministerio de Ecología para incorporar su terreno de 29 hectáreas. Se convirtió en la reserva privada Pozo Tarumá. Los propietarios proyectan recibir a visitantes y plantar árboles de especies nativas.
Ricardo Zardi y su esposa Verónica Cárcamo, un matrimonio oriundo de la provincia de Buenos Aires, firmaron un convenio con el Ministro de Ecología, Víctor Kreimer. De esta manera, los propietarios del predio ubicado en Florentino Ameghino, incorporaron las 29 hectáreas al Sistema de Áreas Naturales Protegidas. Así, los terrenos adquirieron la denominación de reserva privada Pozo Tarumá. Con diferentes herramientas, el mecanismo provincial busca resguardar los ambientes naturales y conservar la biodiversidad.
En la actualidad, el predio cuenta con una casa alimentada por energía generada a través de paneles solares. Precisamente, el matrimonio proyecta recibir a visitantes en un futuro cercano. Además, adelantaron que reemplazarán una plantación de pino que hay en la propiedad por árboles nativos. Ricardo y Verónica son de Moreno, provincia de Buenos Aires. Él es ingeniero electrónico y se desempeña en una empresa de seguridad. Mientras que Verónica ejerce la docencia y trabaja en un estudio contable.
Una historia de admiración por la naturaleza
Tras la rubrica, Ricardo y Verónica comentaron que su admiración por la belleza natural de Misiones nació dos décadas atrás, cuando comenzaron a visitar la tierra colorada. “Estando en una ocasión en Eldorado surgió la idea de comprar tierras en la provincia para la conservación“, explicó Ricardo. En ese sentido, el propietario recordó que comenzaron a investigar y tras una visita a la zona Centro “compramos el predio en Florentino Ameghino”.
Si bien ambos deben retornar a Buenos Aires para cumplir con sus compromisos laborales, la pareja también adquirió una casa en plena zona urbana de Ameghino. La vivienda será utilizada en cada ocasión que visiten la provincia.
Naturaleza apta para todo público
Por otra parte, Ricardo aseguró que su objetivo no era explotar la chacra para la producción, sino que la querían para contribuir a la conservación ambiental. Por ese motivo, contó que rápidamente se pusieron a trabajar para establecer la reserva. Sobre las características del lugar, Ricardo resaltó que uno de los sectores da hacia arroyo Once Vueltas. “Tiene monte nativo, alberga muchas aves, mariposas y otras especies de la fauna autóctona”, describió.
Adelantó que la reserva estará abierta al público y contará con interacciones a cargo de especialistas. “Debemos cuidar a los animales, que necesitan corredores seguros. Ellos no conocen de límites y hay que garantizar su hábitat”, enfatizó. Así dieron otro paso en su sueño por sumar su aporte para la conservación en Misiones.
La historia de esta pareja está ligada a la profunda admiración que tienen por la política ambiental de la provincia. Ambos consideran a Misiones como uno de los pulmones del mundo.
