El mes azul está dedicado a la promoción de la salud masculina con el fin de concientizar la importancia de las consultas médicas para el cuidado integral. La fecha está relacionada con la prevención y control de la diabetes y la lucha contra el cáncer de próstata.
Noviembre es el mes de la promoción de la salud de los hombres, también conocido como el mes azul. El objetivo de esta campaña es concientizar sobre la importancia de los controles médicos para prevenir y tratar enfermedades como la diabetes y el cáncer de próstata.
La fecha está relacionada, además, con la prevención y control de la diabetes, que se conmemora el 14 de noviembre; y el día de la lucha contra el cáncer de próstata, que se rememora el 17.
La primera propuesta es un taller de autocuidado orientado al personal masculino del Ministerio de Salud Pública de la provincia. Será el 9 de noviembre a partir de las 10:00 y la organización está a cargo del equipo de trabajo de la Subsecretaría de Apoyo y Logística.
El encuentro tendrá como prioridad invitar a la reflexión sobre la salud física, emocional y social de los varones. Abordarán la autogestión para el cuidado, realizarán actividades lúdicas y dinámicas grupales que permitan a los participantes expresarse, fortalecer sus vínculos afectivos y desarrollar hábitos saludables.
En el mes de la salud del hombre, recomiendan realizarse chequeos periódicos
El Dr. Gustavo Gómez Muñóz es el responsable del Servicio de Urología del Hospital Madariaga. El profesional de la salud se refirió a la importancia de asistir a las consultas médicas para el cuidado integral, “ya que son un sector un poco reacio a realizarse los controles de la salud”.
Desde el Parque de la Salud recomiendan diferentes consultas y exámenes según edades. “En la adolescencia es importante que concurran a una consulta ya que es una edad de desarrollo y crecimiento, donde hay que tener en cuenta los cambios en los órganos genitales del paciente y su salud sexual y reproductiva”, sostuvo.
A partir de los 45 años, por otro lado, instan a realizar controles prostáticos anuales. Es a esa edad cuando se puede empezar a detectar algún problema. Si el paciente tiene antecedentes familiares de cáncer de próstata, se le insiste para que comience con los exámenes desde los 40 años.
Gómez Muñóz también resaltó la necesidad de chequeos de detección de cálculos a mediana edad. Son piedras que se forman en los riñones y luego migran hacia la vejiga, donde se producen dolores similares a calambres. En muchos casos, este puede ser inmovilizante. Para evitarlos, es importante una buena alimentación e hidratación.
Desde los 50 años en adelante el hombre llega a una etapa denominada andropausia, donde los valores hormonales comienzan a descender. Pueden notarse cambios físicos debido a la disminución de hormonas, en particular en lo relacionado a la función sexual. Por ello, los profesionales recomiendan realizar consultas para despejar dudas.
