Desde hace 15 años que se animan a comercializar estos materiales, llegando a compradores de todo Misiones y distintos países del mundo. Durante el Jeep Fest en San Vicente prepararon recuerdos especiales.
Mar Rojas y Yanny Potschka son dos emprendedores de Aristóbulo del Valle. Juntos trabajan en Minerales Uriel. Los unió la pasión por las piedras y las artesanías. Con las piedras elaboran aros, pulseras, collares y llaveros, entre otros accesorios que los visitantes se llevan como recuerdo de la tierra colorada.
Durante la 16° edición del Jeep Fest en San Vicente, decidieron hacer recuerdos especiales para que los turistas puedan llevarse algo de Misiones. “Un poco de nuestra tierra, de nuestras piedras”, alegaron Rojas y Potschka.
Hace 15 años, comenzó este emprendimiento de productos hechos con piedras. Los impulsores de la iniciativa venden en toda la provincia, incluso lo adquirieron extranjeros que visitaron la provincia. “Queremos resignificar la piedra misionera. Para ello, decidimos armar pequeños recuerdos con los recursos que contamos en Misiones”, aseguraron.
Por primera vez exhibieron sus productos en un evento
Durante la última edición del Jeef Fest en San Vicente, un evento internacional donde competidores de Paraguay, Brasil y Uruguay participan en las travesías de Jeeps, camionetas 4×4 y UTV, los emprendedores aprovecharon la llegada de los visitantes para mostrar lo que hacen. “Vienen de todos lados. Desde Brasil a Paraguay, siempre se llevan cosas que quizás no nos identifican. Queremos que se lleven algo que sea bien misionero, bien nuestro”, destacaron.
Es la primera vez que se animaron a exponer y mostrar su trabajo. “Es importante que contemos con este apoyo porque realmente es mucho trabajo y queremos que la gente conozca nuestra iniciativa”, manifestaron.
Según Mar Yanny Potschka, las piedras especiales que comercializan tienen este nombre por un motivo en particular. “Energía. Sirve para muchas cosas: sanar, atraer lo que queremos, vibrar en otra sintonía”, explicaron.
Asimismo, agregaron que no son solo piedras, “sino un amuleto al que se puede poner una intención desde el amor; y se cumple”.
Con la colaboración de Carolina Hobus desde Aristóbulo del Valle.
