La Oficina del Presidente de la República Argentina (OPRA) emitió un contundente comunicado en el que repudia el reciente ataque de Irán contra Israel, lanzado este domingo. Asimismo, el gobierno argentino manifestó su enérgico rechazo a la designación del militar Ahmad Vahidi como comandante interino de la Guardia Revolucionaria Islámica, un individuo acusado por su presunta participación en el brutal atentado a la AMIA (Asociación Mutual Israelita Argentina) de Buenos Aires en 1994.
“La Oficina del Presidente condena el vil ataque perpetrado por la República Islámica de Irán contra el Estado de Israel, mediante el lanzamiento masivo de misiles y drones dirigidos contra población civil”, remarca el comunicado. A esto se suma el repudio a “la reciente designación de Ahmad Vahidi, uno de los principales imputados por el atentado a la AMIA que provocó la muerte de 85 personas, como Comandante de la Guardia Revolucionaria Islámica”.
Ahmad Vahidi, el militar iraní vinculado a operaciones terroristas
En el mismo texto, el Ejecutivo argentino recuerda que Vahidi posee una trayectoria militar “vinculada a operaciones terroristas”. Además, remarca que el acusado se encuentra con “pedido de captura internacional y una alerta roja de Interpol” desde el año 2007, por su implicación en el atentado contra la AMIA, que conmocionó al país y al mundo.
La investigación llevada a cabo por el fiscal Alberto Nisman es un pilar fundamental en las acusaciones contra Vahidi. Según lo revelado por Nisman, Vahidi “encabezó la mesa de decisiones que evaluó y aprobó la propuesta de atacar en suelo argentino en 1994, con el objetivo de enviar un mensaje político al mundo”, lo que lo posiciona como una figura clave en la planificación del ataque terrorista.
Juicio en ausencia
La OPRA también informó que la Unidad Fiscal AMIA solicitó la “instrumentación del juicio en ausencia”. Esta medida busca permitir que la Justicia argentina pueda avanzar en la investigación y el juzgamiento de Ahmad Vahidi y otros responsables del atentado terrorista, considerado el más letal en la historia del país.
El gobierno argentino enfatizó que “la memoria de nuestros 85 asesinados exige que los responsables rindan cuentas, sin privilegios ni amparos internacionales”. Esta declaración reafirma el compromiso de Argentina con la búsqueda de justicia para las víctimas y sus familias, sin importar las jerarquías o el respaldo internacional de los acusados.
Para finalizar, el gobierno argentino aseguró que la designación de Ahmad Vahidi al frente de la Guardia Revolucionaria Islámica constituye “una provocación inaceptable” por parte de Irán. Esta acción es vista como un desafío directo no solo a la Argentina, sino también “a todos los pueblos libres que defienden la vida y condenan el terrorismo”.
Este pronunciamiento oficial subraya la firme postura de Argentina frente al terrorismo y su histórica demanda de justicia por el atentado a la AMIA. Este evento dejó una profunda cicatriz en la sociedad argentina y permanece como una herida abierta hasta que los responsables sean llevados ante la justicia.
