La Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) advirtió que podría cancelar vuelos durante las vacaciones de invierno debido a la implementación del decreto 378/25. En un comunicado, el gremio responsabilizó al Gobierno por alterar el régimen aeronáutico y anticipó que esta situación generará “cientos de cancelaciones” que afectarán a miles de pasajeros.
El sindicato explicó que, a pocos días de finalizar junio, las programaciones de vuelo para julio aún no están definidas. Las empresas aéreas no saben cómo ajustar sus sistemas ni configurar sus aeronaves para cumplir con la nueva normativa, que calificaron de “inconsulta, ilegítima e ilegal”. Además, criticaron a la Subsecretaría de Transporte Aéreo por la falta de planificación en la implementación de esta regulación.
El Gremio de los pilotos irá a la Justicia por el Decreto 378/25
APLA anunció que iniciará acciones legales para frenar los efectos del decreto, pero advirtió que la incertidumbre ya provoca cancelaciones y complicaciones en la operativa aérea durante un período de alta demanda. El gremio señaló que esta medida impacta negativamente en la industria y en los pasajeros que tenían previsto viajar en el receso invernal.
El decreto 378/25, publicado a principios de junio, modifica el Título V del Código Aeronáutico. Establece nuevos límites para los tiempos máximos de vuelo, períodos de descanso y excepciones para las tripulaciones de la aviación civil aerocomercial. La norma fija un máximo de 1000 horas anuales y 120 mensuales para pilotos, además de detallar descansos mínimos y reglas específicas según la cantidad de tripulantes.
Entre las disposiciones, ningún vuelo podrá superar 8 horas de vuelo en ciertos horarios con dotación mínima, y los límites se amplían si hay tres o cuatro pilotos a bordo. Los descansos mínimos para tripulantes de vuelo y cabina también se incrementan, con reglas claras para compensar excesos. La reglamentación busca alinear el régimen nacional con estándares internacionales, en especial los de la OACI.
Qué dice el gobierno ante los cambios en los vuelos
El Gobierno sostiene que el decreto busca modernizar la industria y reducir costos operativos, eliminando restricciones que antes generaban asimetrías en el sector. Sin embargo, para los pilotos la medida representa un cambio abrupto y difícil de implementar en poco tiempo, lo que pone en riesgo la operatividad y la seguridad.
El conflicto entre el gremio y el Estado se mantiene abierto, con la posibilidad de que se sumen más medidas de fuerza si no se revisan las condiciones. Mientras tanto, los pasajeros enfrentan la incertidumbre sobre sus vuelos durante un período clave para el turismo nacional.
