Los puestos de productores toman cada vez mayor preponderancia al momento de buscar alimentos en relación precio-calidad. El carácter de orgánico y sustentable de los insumos y su complicidad con el bolsillo, son algunos de los factores que fomentan el consumo.
las ferias francas se consolidan como sostén de la cadena alimenticia de gran parte de la población. Los precios -notoriamente menores que los de venta comercial a mayor escala- y las bondades de los insumos, son algunos de los factores que inclinan la balanza a su favor.
Estos puestos de pequeños productores de toda la provincia, son efecto de un trabajo de décadas del estado provincial para apoyar a los trabajadores de la agricultura familiar y el emprendedurismo.
El 5 de septiembre de 1998, el por entonces intendente de Posadas, Carlos Eduardo Rovira impulsó la instalación de ferias francas con el compromiso de fomentar el trabajo de productores urbanos y periurbanos. La primera feria franca se instaló en el barrio Villa Cabello.
A partir de ahí, productores de distintos puntos de la tierra colorada lograron potenciar su trabajo en pos de subsistir, pero además de brindar un importante respaldo a las necesidades alimenticias de los consumidores.
Hoy por hoy, son 25 las ferias francas instaladas en Posadas que abrieron los brazos a trabajadores de toda la tierra colorada, quienes además cuentan con la garantía de ofrecer insumos de calidad.
La naturaleza de sus productos, fruto de la gran capacidad de la mano de obra misionera, pero además libre de químicos y tratamientos agrotóxicos, hacen que los compradores se vayan satisfechos. El desembarco de la empresa de Bioinsumos Agro Sustentable, brindó un sello de calidad sin precedentes en la agricultura provincial.
Los precios, un importante condicionante a favor
Otro factor de suma trascendencia son los precios de venta de productos alimenticios en las ferias francas. Más allá de la inflación de orden nacional, que se ve impactada mayoritariamente en supermercados y grandes comercios, en los puestos de pequeños productores sucede, pero a una escala muy menor.
Según un informe del Instituto Provincial de Estadísticas y Censos (IPEC), el aumento de precios de carnes y derivados fue del 12% referente a la primera parte del 2023, en tanto que para los supermercados el incremento fue superior al 17%.
En cuanto a las frutas, su precio en las ferias tuvo una variación del 3,8%, mientras que en los grandes comercios la diferencia es notoria: 14,1%. En el caso de pan y cereales el precio de los pequeños productores tuvo un incremento del 3,1% en tanto que en el de los supermercados fue el doble.
Pasa el tiempo y las ferias francas se posicionan como un sector amigable y cómplice para los consumidores que buscan precio y calidad en sus productos.
