El piloto argentino, que había partido desde la decimocuarta posición, finalizó en el puesto 15 tras una jornada marcada por maniobras ajustadas, un toque inesperado y una sanción. Apenas comenzada la competencia en el circuito de Spielberg, Franco Colapinto fue embestido por el japonés Yuki Tsunoda.
Ese incidente afectó el rendimiento del auto: dañó el alerón delantero y el piso del monoplaza, justo cuando el argentino comenzaba a mostrar mejoras en su ritmo. Como si fuera poco, más adelante recibió una penalización de cinco segundos por bloquear a Oscar Piastri, piloto de McLaren.
Tras finalizar la carrera Colapinto explicó después que no lo vio venir. “Estaba peleando con Tsunoda y solo quería adelantarlo después del choque. A Piastri lo tenía en el punto ciego”, contó a la prensa.
Tras bajarse del auto, el joven piloto hizo un breve balance. “No fue una carrera fácil. El ritmo al principio fue malo y nos costó mucho. Al final mejoramos, pero ahora hay que revisar todo con el equipo y volver más fuertes”, dijo con autocrítica.
Sobre el toque inicial, comentó que Tsunoda se disculpó al finalizar la carrera. “Me pidió perdón y está todo bien. Fue una lástima, porque justo veníamos en ascenso”, agregó.
En paralelo, los puntos del Gran Premio se repartieron entre los diez primeros. Lando Norris se quedó con el triunfo y sumó 25 unidades. Lo siguieron Piastri, Leclerc, Hamilton y Russell, entre otros.
Colapinto ya piensa en su próxima presentación. Volverá a subirse al monoplaza este viernes, cuando participará de las prácticas libres del Gran Premio de Silverstone, en el Reino Unido. Con una agenda apretada y varias lecciones por repasar, el argentino buscará dejar atrás esta carrera para seguir consolidándose en el exigente mundo de la Fórmula 1.
