Con los aumentos de las boletas de luz tras las medidas económicas del gobierno nacional, muchas personas buscan nuevas formas de ahorrar en electricidad. Gracias a los paneles solares, se puede reducir por lo menos entre un 30% y 40% el consumo que se transfiere a los importes de la energía.
Las energías renovables no son solamente una opción que aporte grandes soluciones a la lucha contra el cambio climático. A partir de la suba de los servicios de luz y agua que se anunciaron desde el Gobierno Nacional y empiezan a regir con aumentos mensuales, también son parte de una necesidad económica.
Con la promulgación de la Ley de Balance Neto y Generación Distribuida, los misioneros cuentan con la posibilidad de utilizar cualquier sistema de energía renovable dentro de su hogar o también en el desarrollo de su emprendimiento. Esto fomenta la incorporación de sistemas como los paneles solares, que son una tendencia en alza dentro de la provincia.
En una nota exclusiva con Canal 12, un comercio especializado en la venta de paneles fotovoltaicos explicó que existen dos opciones, a grandes rasgos, para la incorporación de este sistema eléctrico. Estos equipos se dividen entre los que cuentan con baterías y aquellos que no, y varían su utilización en relación a las necesidades de cada usuario.
Ventajas y modelos existentes
Gracias a estos aparatos, se puede apuntar a reducir el consumo tradicional entre un 30% y hasta un 50%, dependiendo del correcto uso. En el caso de los equipos que incluyen baterías, el ahorro puede ser mayor ya que no dependen únicamente de los horarios donde el sol aporta más potencia. “Se alarga la curva de aprovechamiento del sol porque una vez cargada la batería, se puede seguir utilizando durante la noche”, explicaron.
Otro de los puntos a favor que tienen estos paneles es la compensación energética que pueden ofrecer ante situaciones de corte de la red de energía. Esto es ideal para las temporadas más calurosas del verano en que suelen realizarse interrupciones del servicio de forma estratégica para mantenimiento y por la gran demanda que existe. También los núcleos familiares de zonas rurales más alejadas están incorporando estos sistemas para obtener mayor confort en sus hogares.
Los vendedores sostienen que frente a facturas de energía muy abultadas, las personas acuden a este tipo de soluciones. Que además de cuidar el bolsillo, mediante el ahorro de energía, es amigable con el ambiente.
Finalmente, también destaca en estos equipos su larga duración de vida. Según informaron desde el comercio consultado, pueden durar 25 años en el techo de una casa. Así, es posible comenzar con pequeñas inversiones y expandir progresivamente el uso de los paneles para paliar el consumo, incluso en dimensiones industriales.
Es decir que con poco dinero se puede comenzar con un panel y con el paso de los años incorporar más paneles en función del aumento del consumo o las nuevas necesidades. Cabe señalar que los dispositivos están diseñados para interactuar en forma complementaria con la red eléctrica, generan energía limpia y renovable.
