El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) enfrenta un escándalo judicial tras la difusión de audios obtenidos por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. Los mismos comprometen a exfuncionarios del gobierno de Pedro Sánchez en una red de corrupción. El caso, bautizado por los medios como “caso Koldo”, incluye el pago de al menos 620 mil euros en sobornos y referencias explícitas a encuentros con prostitutas financiados con fondos públicos.
Entre los principales involucrados figuran el exministro José Luis Ábalos y su exasesor Koldo García. También fue mencionado Santos Cerdán, actual secretario de Organización del PSOE y hombre cercano al presidente Sánchez. La prensa local publicó transcripciones y audios que detallan el funcionamiento de la presunta red delictiva. Según las investigaciones, parte del dinero se habría destinado al pago de mujeres descritas en los chats como “brasileiras” o “amigas”, además del alquiler de pisos turísticos entre 2020 y 2021, utilizados como lugar de encuentro con estas personas.
La trama de la prostitución sacude al partido de Pedro Sánchez
El diario El Mundo se refirió a una de las mujeres involucradas como “Anaís, la pija del porno”. Según el medio, su nombre real sería Letizia Hilton y habría participado en producciones de cine adulto. El sitio The Objective informó que la mujer se encontraba en la casa de Ábalos al momento de un allanamiento y que intentó esconder un disco duro en su ropa, hecho constatado por la Guardia Civil y comunicado al juez Leopoldo Puente.
Los registros telefónicos de Koldo García incluyeron nombres como “Adriana Brasileira”, “Alini Da Silva” y “Tatyy”. La UCO indicó que estas personas formaban parte de un “equipo” de mujeres brasileñas destinado a agasajar a contratistas. Víctor de Aldama, otro de los mencionados en la causa, declaró que Koldo era quien “se encargaba” de coordinar la presencia de las mujeres.
La oposición calificó a Sánchez de “indecente, corrupto y traidor”
Pagos anotados bajo conceptos como “fiestas”, “la puta del otro día” o “mamadas” fueron señalados por los investigadores como evidencias del uso de fondos públicos en estos eventos. La columna De puteros y triángulos, publicada en El País, abordó la contradicción entre estos hechos y la postura del PSOE, que impulsa una ley para abolir la prostitución. “Repartirse mujeres para un fin de semana” fue una de las frases extraídas de las grabaciones que compromete aún más a los implicados.
La repercusión política fue inmediata. Pilar Bernabé, dirigente socialista, calificó el caso de “asqueroso y repugnante”. Diversos sectores del partido reclamaron sanciones para el consumo de prostitución en el código ético interno. Además del rechazo interno, el escándalo provocó tensiones con los aliados del oficialismo. Dirigentes de Sumar, coalición que integra el gobierno de Sánchez, evalúan su continuidad en la alianza tras la revelación de estos hechos.
En el Congreso de los Diputados, la oposición calificó a Sánchez de “indecente, corrupto y traidor”. La investigación continúa con nuevas filtraciones de conversaciones privadas entre los exfuncionarios implicados.
