La Policía Ambiental patrulló áreas protegidas de Santiago de Liniers y otros puntos de la zona norte. En los procedimientos detectaron elementos utilizados para la caza furtiva. También despejaron cursos de agua alterados por redes de pesca.
La Policía Ambiental intensifica los patrullajes en áreas rurales. En el marco del Operativo Montaraz, la fuerza desplegó sus unidades especiales en áreas protegidas donde detectaron campamentos y trampas de cazadores furtivos.
Actuaron íntegramente los agentes de las Unidades Regionales III Eldorado y XV Montecarlo. Además los integrantes de las divisiones Delitos Rurales de Nueve de Julio, Montecarlo y la Guardia Infantería.
En esta ocasión, en reservas privadas de Santiago de Liniers, los policías detectaron campamentos, además de saleros y varias trampas utilizadas para la caza furtiva. También destruyeron redes de pesca que alteraban los distintos cursos de agua.
Los uniformados fueron distribuidos de forma estratégica en las zonas productoras de la región, con la misión de proteger los cultivos, contrarrestar delitos de abigeatos, contrabando y narcotráfico.
