El Tribunal Penal N.° 1 de Posadas dio a conocer este martes los fundamentos de la sentencia contra Germán Kiczka, exlegislador provincial, y su hermano Sebastián, en el marco del juicio por delitos de explotación sexual infantil. Los jueces sentenciaron a ambos con penas efectivas de prisión: a Germán, 14 años, y a Sebastián, 12.. El fallo se resolvió por mayoría, con disidencias de la jueza Viviana Cukla.
Los detalles de las penas de los Kiczka
En el documento se señala la condena “por mayoría a Kiczka Germán […] a la pena de catorce (14) años de prisión de cumplimiento efectivo […] por ser encontrado autor penalmente responsable del delito de tenencia, facilitación y distribución de material de explotación sexual infantil agravado por ser las víctimas menores de 13 años de edad en concurso real”.
Sobre Sebastián Kiczka, los jueces aseguraron una “pena de doce (12) años de prisión de cumplimiento efectivo […] por ser encontrado autor penalmente responsable del delito de tenencia y facilitación de material de explotación sexual infantil agravado […] y abuso sexual sin acceso carnal”.
La jueza Cukla, en ambos casos, propuso penas más bajas. Para Germán, votó por ocho años, y para Sebastián, por seis. Cukla señaló que correspondía “condenar […] por el delito de tenencia y facilitación de material de explotación sexual infantil agravado […] en concurso ideal”, lo que modificó su valoración de las penas.
La postura de los fiscales
Al respecto de la condena el fiscal Martín Rau manifestó a Canal 12 que “como fiscales del caso, vamos a estudiar los fundamentos para poder entender bien cada una de las decisiones que han tomado los jueces”. Agregó que “tenemos una tarea que no es menor, que es la de controlar la ejecución de la pena de estas dos personas que fueron condenadas”.
En ese marco, precisó el rol del Ministerio Público durante esta nueva etapa, en el que “cada vez que hay que tomar una decisión se nos corre vista para que nosotros emitamos opinión, que no es vinculante para el tribunal. El tribunal puede disponer lo que ellos entienden que es lo más correcto para el caso”.
Las diferencias jurídicas en el fallo
En tanto, el fiscal adjunto Vladimir Glinka explicó que la disidencia de la jueza Cukla se centró en la valoración de los hechos y el encuadre jurídico. Ya que “la jueza Cukla en principio no consideró acreditado el abuso sexual simple, eso y por supuesto tiene un impacto en la pena”. También señaló que “nosotros consideramos un concurso real, aparentemente ella habría considerado un concurso ideal y eso también se había reflejado en la pena”.
No obstante, Glinka indicó que las diferencias estuvieron basadas en criterios jurídicos legítimos. Puntualmente “es básicamente lo que estimamos que fue el razonamiento que hizo ella, entonces la pena que ella termina consignando que es inferior a las otras tiene que ver con este razonamiento que ella nos adelantó. Evidentemente acá estuvo bien trabajada la cuestión y cada uno lleva su conclusión”.
Las repercusiones en el ámbito legal

Por otra parte, la abogada Aryhatne Bahr, especialista en ciberdelitos y candidata del Frente Renovador Neo como diputada provincial, valoró la trascendencia institucional del juicio. Ya que “vino a sentar un precedente tanto a nivel provincial como a nivel nacional. Estamos muy contentos los que estamos relacionados o vinculados de cierta manera a este tipo de delitos, más que nada los que tienen que ver con el material de abuso sexual infantil”.
Bahr agregó que el juicio generó una mayor visibilidad del problema. Por eso, señaló que “la realidad es que fue un juicio polémico, pero que nos dañó mucho como sociedad. Si le tenemos que sacar algo positivo a todo esto es que a partir de este juicio se comenzó a hablar mucho más de todo lo que es material de abuso sexual infantil. Los delitos que ocurren en los entornos digitales y que son tan importantes como los que ocurren en un plano físico”.
Fotos: Marcos Otaño.