Cada 30 de mayo, en la Argentina se conmemora el Día Nacional de la Donación de Órganos. En Misiones, la efeméride no pasa desapercibida. El Centro Único Coordinador de Ablaciones e Implantes de la provincia (CUCAIMIS) prepara una jornada de concientización con actividades en distintos hospitales y espacios públicos. Más allá de la fecha, los indicadores hablan por sí solos: Misiones mantiene desde hace más de una década un desempeño destacado en materia de trasplantes, ubicándose por encima de la media nacional.
El doctor Luis Esquivel, director del CUCAIMIS, sostuvo que en la provincia hay actualmente unas 70 personas en lista de espera para trasplantes renales, en contraste con más de 5.500 a nivel país. “En cuanto a córneas, prácticamente no hay lista de espera”, afirmó. Gracias a una articulación eficaz entre el sistema sanitario, la comunidad y el Estado, quienes requieren una córnea en Misiones suelen acceder a ella en menos de dos meses.
Una red que salva vidas: hospitales, Estado y sociedad civil
Este 30 de mayo, el Hospital Escuela de Agudos Dr. Ramón Madariaga instalará un stand informativo en su entrada principal para promover la donación de órganos. En paralelo, el Hospital Pediátrico Dr. Fernando Barreyro ya elaboró materiales audiovisuales orientados a concientizar a niños y adolescentes. A estas iniciativas se sumarán los hospitales de Eldorado, Oberá y San Vicente con campañas propias.

“Estas acciones tienen como objetivo informar a la población y destacar el valor de donar. Cada trasplante salva o mejora vidas, y eso es fundamental que la comunidad lo entienda”, remarcó Esquivel. Además, reconoció el rol central de las familias donantes: sin su voluntad, no habría posibilidad de trasplante. También agradeció el respaldo logístico del Gobierno provincial, que pone a disposición medios de transporte aéreo, fuerzas de seguridad y bomberos para agilizar los operativos.
Por otra parte, destacó el papel clave del sistema judicial. En casos de muertes violentas, su intervención es necesaria para autorizar la ablación de órganos. “Es un trabajo articulado, complejo, pero profundamente humano”, sintetizó.
Donar es un acto racional, no solo generoso
En Argentina, la legislación vigente establece que toda persona mayor de edad es donante salvo que haya manifestado lo contrario en forma explícita. “No alcanza con decir que uno no quiere donar. Hay que registrarlo en el DNI o en la aplicación Mi Argentina”, explicó Esquivel. De lo contrario, se considera donante por defecto. En el caso de los menores, la autorización debe ser otorgada por sus familiares.

El director del CUCAIMIS subrayó que, más allá del aspecto altruista, la donación también debe pensarse como una conducta racional. “Ser donante es ser inteligente. Si todos lo fuéramos, el día que cualquiera de nosotros necesite un órgano, lo tendría disponible”, afirmó.
En la actualidad, alrededor de 7.000 personas en el país aguardan un trasplante de órganos y otras 3.000 esperan tejidos. De allí la importancia de generar conciencia sobre el impacto de cada decisión. “Uno nunca sabe cuándo puede estar del otro lado”, enfatizó Esquivel.
Derribando mitos que frenan la donación de órganos
Uno de los obstáculos persistentes para la donación de órganos es la desinformación. Desde CUCAIMIS señalaron que aún circulan mitos infundados que siembran dudas y temores. “Algunas personas creen que, si en el DNI figura que son donantes y tienen un accidente, los médicos no los salvarán para extraer sus órganos. Eso es falso y peligroso”, aseguró Esquivel.
Explicó que, para que un órgano pueda ser trasplantado, el cuerpo debe estar en terapia intensiva y con soporte vital. Si el corazón se detiene, la mayoría de los órganos dejan de ser viables, excepto las córneas. “Los profesionales hacen todo lo posible por salvar la vida del paciente, porque si no sobrevive, tampoco lo harán sus órganos”, agregó.
Respecto al tráfico de órganos, el funcionario fue contundente: “Con el sistema actual, es imposible”. Cada operativo involucra a más de 100 personas en distintas partes del país, y todo el proceso está monitoreado por el INCUCAI. “Incluso en un circuito privado, sería inviable. La compatibilidad inmunológica entre donante y receptor solo puede confirmarse después de la muerte. Secuestrar a alguien con ese fin no tiene sentido, porque probablemente no sea compatible”, explicó.
Esquivel también se refirió a los tiempos críticos en los que deben realizarse las ablaciones. “El corazón, por ejemplo, debe ser trasplantado en menos de dos horas. Cada minuto cuenta. Por eso es tan valioso el apoyo del Gobierno para el traslado inmediato con helicópteros y aviones”.
Más tecnología para ampliar las posibilidades de trasplante
Uno de los avances más esperados por CUCAIMIS es la incorporación de dispositivos de perfusión renal. Se trata de pequeñas máquinas que bombean un líquido especial a los riñones ablacionados para mantenerlos en buen estado por más tiempo. “Con esto, podremos extender la viabilidad de los órganos y asegurar que lleguen en mejores condiciones a cualquier punto del país”, detalló Esquivel.
El Hospital Madariaga ya inició las gestiones para recibir dos de estas unidades, lo que posicionaría a Misiones entre las provincias con mejor infraestructura tecnológica para trasplantes. “Es un paso enorme. Significa más oportunidades para los pacientes y más eficiencia en cada procedimiento”, afirmó el director.
En el caso de las córneas, también hay novedades importantes. Dispositivos modernos permiten medir con precisión la cantidad de células en cada capa de la córnea. Esto mejora la selección y el uso del tejido, incluso habilita la posibilidad de que una misma córnea sea utilizada para dos receptores distintos.

Estas innovaciones, sumadas a la experiencia acumulada en los últimos años, consolidan el lugar de Misiones como referente nacional en materia de trasplantes.
Más allá del quirófano: programas sociales y deportivos
Desde CUCAIMIS se sostiene un acompañamiento integral a las personas trasplantadas. “No basta con realizar el trasplante. Hay que garantizar la medicación, los controles y la contención emocional”, remarcó Esquivel. Por ello, el organismo coordina una serie de programas que incluyen desde el acceso al transporte público hasta la entrega gratuita de medicamentos inmunosupresores para quienes no tienen obra social.
Una de las iniciativas más destacadas es el Programa de Deporte Adaptado, impulsado por la Ley XVII-200. Esta normativa promueve la actividad física en personas trasplantadas, donantes y quienes están en lista de espera, como parte de su recuperación integral. La propuesta tiene base en el Parque de la Salud y cuenta con una línea de formación docente a través del Ministerio de Educación.
Gracias a este programa, varios misioneros participaron de competencias nacionales. Para este año, el objetivo es representar a la provincia en la Olimpiada Mundial de Trasplantados, que se celebrará en Alemania. “Los pacientes nos cuentan que el deporte les devuelve bienestar, energía y ganas de vivir”, compartió Esquivel.

Además, recordó el caso de una mujer que, luego de recibir un riñón en Misiones, pudo quedar embarazada y tener un hijo. “Esos testimonios nos dan la fuerza para seguir trabajando. Porque no solo se salva una vida: se transforma”.
Un modelo de gestión que inspira
La labor de CUCAIMIS no se limita al ámbito clínico. La entidad articula con escuelas, medios de comunicación, fuerzas de seguridad, organismos judiciales y ministerios para consolidar una red que prioriza la vida. “Nuestro modelo de gestión es integral. Por eso hemos logrado sostener indicadores tan buenos durante más de diez años”, concluyó Esquivel.
En el Día Nacional de la Donación de Órganos, Misiones renueva su compromiso con la vida. Y demuestra, con datos y acciones, que donar es el acto más humano, racional y transformador que se puede realizar.