Lorena Rambo, una mamá de Garupá, tenía un embarazo sin complicaciones. Pero días después del parto, su cuerpo comenzó a enviar señales de alerta. La presión arterial se elevó repentinamente y fue entonces cuando la atención médica rápida y precisa del Parque de la Salud de Misiones cambió su historia.
Allí, en el Hospital Materno Neonatal, le detectaron a tiempo una hipertensión posparto, que hoy, casi cuatro meses después, mantiene bajo control.
“El embarazo fue excelente. Pero en el puerperio empecé a tener presión alta. Vine a la guardia y gracias al accionar de la Dra. Lorena Molda, me realizaron todos los estudios necesarios y me dejaron internada”, contó en diálogo con Canal12misiones.com. En apenas dos horas, los análisis de sangre ya estaban listos y el equipo médico confirmó alteraciones que requerían internación y monitoreo estrecho.
Durante su estadía, Lorena fue atendida por un equipo interdisciplinario: Cardiología, Nefrología, Obstetricia y Nutrición, con profesionales como el Dr. Pablo Irusta, el Dr. Matías Dornelles y la misma Dra. Molda. “La atención fue pronta y eficaz. No sabía que los estudios salían tan rápido en el Madariaga”, destacó.
Uno de los momentos más delicados fue la separación física con su bebé recién nacida, Helena Anahí. Pero el sistema respondió con sensibilidad. “Me permitieron entrar a verla junto a mi marido para continuar con la lactancia. Eso fue clave para mí y para la salud de mi hija”, recordó.
Lorena es oriunda de Puerto Rico, llegó a Posadas en 2015 para estudiar y actualmente vive en Garupá. Su bebé nació en febrero de este año por cesárea de urgencia, y la internación fue en marzo, durante cuatro días. Hoy Helena está sana y su madre continúa un tratamiento médico con controles semanales. “Cada semana mando mi planilla con los registros de presión al hospital. Me mido dos veces por día. El Dr. Irusta revisa todo y decide si se ajusta la medicación o no”, explicó.
La contención emocional también fue fundamental. “Me sentí súper cuidada. Las enfermeras de la UTPR estuvieron siempre atentas, tanto a mí como a mi marido y a mi beba. Recuerdo un episodio donde mi presión bajó mucho y no podía ni hablar: actuaron rapidísimo con la Dra. Rey”, contó. También destacó la profesionalidad del personal al tomar muestras: “Ni siquiera sentía los pinchazos, de lo delicadas que eran”.
Sobre el sistema de salud pública de Misiones, Lorena valoró especialmente la calidad médica y la tecnología utilizada. “La infraestructura puede mejorar, pero la atención fue excelente. Me visitaban constantemente, me daban informes, se ocupaban de que yo entendiera todo lo que me pasaba”, expresó.
Con serenidad, pero también con claridad, dejó un mensaje para otras mamás: “El embarazo no termina cuando nace el bebé. Vayan a los controles, cuiden su salud para poder cuidar también a sus hijos. Los médicos están para ayudarnos, solo hay que comprometerse y confiar”.
La historia de Lorena refleja la importancia de un sistema de salud presente, humano y eficiente, que no solo actúa ante la urgencia, sino que también acompaña, escucha y da respuestas concretas. En Misiones, esa respuesta tiene nombre: el Parque de la Salud.
