Los clubes de abuelos de Oberá disfrutan de los encuentros de Té Jardinero, una iniciativa que promueve la socialización entre adultos mayores a través de actividades lúdicas y el amor por la naturaleza. Durante estas tardes especiales, los participantes comparten infusiones mientras intercambian plantas, conocimientos y experiencias de vida. La decoración de macetas se convirtió en una de las actividades predilectas. En esta actividad cada asistente personaliza su recipiente y siembra un nuevo ejemplar de una planta.
El primer encuentro reunió a miembros de los clubes de Hultgren, Barreyro y Bella Vista en la Biblioteca Vamos a Leer de Villa Lohr. Posteriormente, el barrio Krause fue sede de la segunda edición con la participación de los grupos de San Miguel, Km 9, Villa Svea y Barrio Norte. Estos eventos ya tienen programadas nuevas fechas para continuar expandiendo la red de conexiones entre los adultos mayores de diferentes sectores de la ciudad.
El éxito de los Tés Jardineros tiene dos pilares, el entusiasmo de los participantes y la dedicación de las profesoras que coordinan las actividades. Muchos asistentes destacan cómo estas reuniones les permiten salir de su rutina, conocer nuevos amigos y mantener vivas sus habilidades sociales. La jardinería funciona como hilo conductor, generando temas de conversación y objetivos comunes entre personas de distintos barrios.
Además de fomentar la convivencia, estos encuentros contribuyen al cuidado del ambiente mediante el intercambio de plantas y conocimientos sobre cultivos. Los organizadores observan cómo cada edición fortalece los lazos interpersonales y despierta nuevas pasiones entre los adultos mayores. La actividad combina perfectamente el aspecto social con el contacto con la naturaleza, creando un espacio de crecimiento personal y comunitario.
La iniciativa sigue sumando adeptos, con nuevos clubes interesados en participar de las próximas convocatorias. Los adultos mayores encuentran en estos encuentros una valiosa oportunidad para mantenerse activos, aprender y transmitir sus saberes. El programa demuestra cómo actividades simples como compartir un té y cuidar plantas pueden transformarse en poderosas herramientas para una vida social activa.