La empresa Biotango utiliza la IA para ayudar a los productores frutícolas a desarrollarse en el mercado sustentable. Consiguió el reconocimiento del Basque Culinary Center (BCC), uno de los centros de investigación gastronómica y culinaria más prestigiosos del mundo.
La inteligencia artificial (IA), el avance tecnológico que más dio qué hablar en los últimos meses, está en el centro del proyecto de la empresa argentina Biotango. La firma utiliza esta herramienta disruptiva para ayudar a los productores frutícolas a desarrollar cultivos más sostenibles.
La empresa, lanzada en noviembre de 2023, consiguió el reconocimiento del español Basque Culinary Center (BCC), uno de los centros de investigación gastronómica y culinaria más prestigiosos del mundo. Este aval llegó en la etapa de Buenos Aires de la segunda edición de su certamen Culinary Action! On the Road!
“Es una herramienta que sirve no solo para mitigar, sino para adaptar a los productores a la hora de producir alimentos y no contaminar”, aseguró la consejera delegada de Biotango, Natalia Melián. Según la compañía emergente, el 30 % de la producción anual de frutas se desperdicia por “falta de herramientas de precisión”.
La IA, una herramienta versátil
Por su parte, el director científico de Biotango, Gerardo Sánchez, explicó que el proyecto utiliza la avanzada tecnología de la IA para analizar una gran cantidad de datos genómicos de los frutales y del clima.
“Actuamos con estaciones aero-climáticas instaladas en los campos de cultivo, también con predicciones de escenarios climáticos futuros“, contó el biotecnólogo, quien trabaja en este proyecto desde hace cuatro años. Además, considera que las condiciones tecnológicas presentes son claves para la buena recepción que tiene el proyecto.
“Confluye la posibilidad de capturar datos con que cambian el clima de una parte del mundo, con la posibilidad de analizar genomas y con el desarrollo de las capacidades técnicas de la IA (…) Esa confluencia permite abordar un problema que parecía inabordable: la interacción entre la genética y el ambiente”, explicó.
De camino al mercado europeo
De momento, Biotango opera en cultivos de melocotones en Argentina, Chile y Perú. También en plantaciones de plátanos y bananas en Colombia. Su objetivo es acceder al mercado español, el segundo más importante del mundo en el cultivo de melocotones, detalló la consejera delegada de Biotango.
Para ellos, el reconocimiento del BCC facilitará su conexión con el ecosistema español. Ahora, Biotango tendrá que competir en San Sebastián (España) con los proyectos de otras empresas emergentes del sector alimentario que resultaron ganadores en los certámenes o “paradas” del BCC en Tokio, Nueva York, Copenhague y Londres.
En la edición de 2024, Biotango compitió con otros cuatro emprendimientos muy diferentes entre sí. La plataforma de integración de datos de cadena de valor alimentaria Tracestory; el servicio automatizado de pedidos de comida Vici; la optimizadora de fermentación de harinas Pan-ciencia; y Ecofrit, una atrevida propuesta de escamas vegetales capaces de convertir el aceite usado en una gelatina fácilmente desechable.
Fuente: EFE
