Con rugidos de motores y promesas de volver, concluyó este fin de semana el Primer Encuentro Internacional de Harley-Davidson en Misiones. La ciudad de Posadas fue epicentro de un evento que congregó a fanáticos de las míticas motos de todo el país y de Sudamérica, a la par que impulsó el turismo, la gastronomía y la hotelería local en un fin de semana largo que superó las expectativas.
El cierre del encuentro se vivió con una cena especial en Temple Bar, sobre la costanera posadeña. Allí, entre shows en vivo y DJ, los visitantes celebraron la experiencia vivida a lo largo de los tres días de recorridos por rutas misioneras. “Esto es una hermandad, es un sentimiento único que compartimos todos los que somos parte de la familia Harley-Davidson”, expresó un participante proveniente del estado brasileño de Paraná, que además remarcó lo mucho que le gusta visitar Posadas, ciudad que ya conocía por cuarta vez.
El itinerario incluyó una concentración el viernes en El Brete, con un recorrido posterior hasta la Cruz de Santa Ana. Allí disfrutaron de una jornada entre asado, música y actividades recreativas en el parque temático. “Harley es una pasión, una vida de muchos años. Es una reunión de amigos y hermanos de las rutas, no es solo Argentina, es todo Sudamérica”, destacó otro motociclista que viajó desde La Plata y se mostró maravillado con la capital misionera.

Durante todo el evento, entre 200 y 250 motocicletas circularon por distintos puntos de la provincia, lo que despertó la curiosidad y el entusiasmo de residentes y turistas, quienes aprovecharon para fotografiarse junto a las emblemáticas máquinas. La postal se repitió en cada parada: motos relucientes, banderas de distintos países, y un público que aplaudía el paso de la caravana.
El encuentro de Harley-Davidson impulsó el turismo posadeño
El evento marcó un hito, ya que fue la primera vez que este tipo de encuentro se realizó en Posadas. Varios participantes destacaron la infraestructura de la ciudad, sus rutas en buen estado, la costanera y la belleza de los paisajes naturales. La hospitalidad local fue otro factor clave, generando un impacto emocional que terminó sellado con la frase más repetida del fin de semana: “Que se repita”.

Más allá del simbolismo y la pasión por las dos ruedas, el evento dejó cifras significativas en términos turísticos y económicos. Según datos del Ministerio de Turismo de Misiones y la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), durante el fin de semana largo por el Día de la Bandera, la provincia alcanzó un promedio del 80% de ocupación hotelera.
En Posadas, la cifra fue del 100% de ocupación, gracias a la confluencia de actividades que incluyó no solo el encuentro de Harley-Davidson, sino también competencias deportivas nacionales como el Turismo Carretera y el Torneo Federal de Saltos Hípicos.
Se estima que más de 18.000 visitantes arribaron a la provincia entre el jueves 19 y el domingo 22 de junio, generando más de 66.000 pernoctaciones, con una estadía promedio de 2,3 noches. En Posadas, ese promedio se extendió a más de tres noches debido a la nutrida agenda cultural y deportiva.

Puerto Iguazú también tuvo un movimiento notable, con 12.000 visitantes en el Parque Nacional Iguazú y 19 vuelos arribando durante el fin de semana. En tanto, otros destinos como Oberá, San Ignacio y El Soberbio alcanzaron ocupaciones del 65%, impulsadas por el turismo de naturaleza y escapadas cortas.
La articulación entre sector público y privado, la diversidad de propuestas y la apuesta por eventos de alto impacto refuerzan el perfil de una provincia que apuesta al turismo como motor de desarrollo.