Con la mirada puesta en el futuro de la producción agropecuaria, Silicon Misiones, en articulación con el Servicio Provincial de Enseñanza Privada (SPEPM) y la Secretaría de Inteligencia Artificial, comenzó a dictar una capacitación pionera para docentes de las Escuelas de la Familia Agrícola (EFA) e Institutos Educativos de Alternancia (IEA). Se trata del curso “Bioestadística e inteligencia artificial para la optimización de la huerta”, que busca introducir a educadores rurales en el uso de nuevas tecnologías aplicadas al agro.
La iniciativa propone una transformación profunda: integrar la recolección y análisis de datos en las huertas familiares para mejorar la toma de decisiones productivas. El programa, compuesto por dos encuentros de dos horas, enseña a aplicar principios de bioestadística, análisis de datos y herramientas de inteligencia artificial en los cultivos.
Paola Pless, integrante de Silicon Misiones, remarcó la importancia de que el productor pueda basarse en información concreta y no en la intuición. “La vía estadística sirve para obtener datos, recolectar información que nos va a llevar a tomar decisiones”, señaló. En ese sentido, explicó que si a partir del análisis de datos se observa que un fertilizante mejora el rendimiento de la huerta, el productor podrá optar con mayor seguridad por ese insumo en futuras temporadas.
Bioestadística impulsada por inteligencia artificial
Pless también subrayó que uno de los grandes objetivos es agilizar y optimizar los procesos. Antes, dijo, los registros se llevaban en planillas de Excel, pero con la incorporación de inteligencia artificial, el análisis se vuelve más eficiente y preciso. “Vamos a recibir datos más rápidamente, mejorar los tiempos y los recursos que se usan en interpretar esa información”, afirmó.

La capacitación se está desarrollando con distintas jefaturas del interior de Misiones, y según Pless, el enfoque es doble: primero formar a los docentes, y luego trasladar estos conocimientos a sus estudiantes. “Queremos formar al productor del futuro, uno que no tenga miedo de utilizar herramientas de inteligencia artificial y que sepa aprovechar bien los datos que recolecta en su chacra”, expresó.
El programa no solo apuesta por mejorar la productividad de las huertas, sino que también promueve un cambio cultural en la forma de enseñar y producir en el ámbito rural. La articulación entre tecnología y educación se vuelve, así, una clave estratégica para el desarrollo sustentable de la provincia.