Con 90 años y una vida marcada por el trabajo y el compromiso, Juan Bys ejerció su derecho al voto en las elecciones del 8 de junio en Oberá. El nonagenario demuestra con el ejemplo que la participación ciudadana no tiene edad. Naturalizado argentino después de emigrar de Polonia en 1938, ha sido testigo de décadas de historia política, desde gobiernos democráticos hasta dictaduras. El ya jubilado nunca perdió la convicción de que el pueblo debe elegir a sus representantes. Aunque en 2021 no votó por problemas personales, esta vez -animado por su hija- decidió sumarse nuevamente al acto cívico que considera fundamental.

Una mirada crítica
La mirada de Bys sobre los gobiernos nacionales es crítica. Con una voz cargada de experiencia, cuestiona algunas decisiones. Sin embargo, destaca positivamente la gestión de Raúl Alfonsín como un ejemplo, a quien considera un presidente que apoyó a las Pymes con medidas como la exención del IVA para pequeños contribuyentes, algo que benefició directamente su negocio familiar.
En contraste, su visión sobre los gobiernos provinciales de los últimos 20 años es más optimista. Bys reconoce avances en infraestructura, políticas agropecuarias y desarrollo turístico que convirtieron a Misiones en un polo de crecimiento. En diálogo con canal12misiones.com, destacó los avances obtenidos. “Las rutas, los planes de trabajo y la llegada de migrantes de otras provincias cambiaron la región”, afirmó. Para él, la gestión local supo impulsar la economía sin descuidar a los trabajadores.
Su relato sobre la dictadura militar (1976-1983) refleja las contradicciones de esa época: mientras él transitaba la ruta 11 sin ser molestado, conocía historias de amigos extorsionados o desaparecidos, como el caso de Carlos “El Colorado” Zaremba, cuyo status sigue siendo desaparecido.
Aunque hoy ve con escepticismo el rumbo de la Argentina, Bys no pierde la esperanza en que las futuras generaciones mejoren el país. “La democracia tiene sus problemas, pero es lo que nos permite elegir”, afirma. Su voto, a los 90 años, es un símbolo de esa lucha constante por participar, incluso cuando los resultados no siempre coinciden con sus expectativas.