Fundaciones proteccionistas buscan aunar esfuerzos con el gobierno provincial para la conservación de cuatro especies de monos. El proyecto a largo plazo implica la importación de individuos desde Brasil para reintroducirlos.
Desde 2001, la Fundación Neotropical Primate Conservation sede Argentina desplegó sus esfuerzos para la conservación de las especies de monos que encuentran su hogar en Misiones. La dra. Luciana Oklander, referente de la organización en la provincia e investigadora del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), lideró este compromiso que recientemente se presentó ante el Ministerio de Ecología.
El foco principal de la institución recae en un ambicioso plan: salvar de la extinción al mono aullador rojo (Alouatta guariba), una especie emblemática de la región. En la tierra colorada coexisten cuatro especies: los carayás rojos, los negros, los dorados y los caí, estos últimos frecuentes en el Parque Nacional Iguazú.
Reintroducción de especies para contribuir con la biodiversidad local
“Utilizamos a estas especies como bandera para conservarlos no solo a ellos, sino también los hábitats en los que residen y a las especies que comparten territorio”, explicó Oklander. La fundación se propuso un proyecto a largo plazo que implica la importación de individuos desde Brasil. La idea es reintroducirlos en áreas específicas donde la especie se extinguió.
“Nuestros esfuerzos están destinados a garantizar que esta especie continúe existiendo. Buscamos implementar medidas concretas, como la introducción de individuos en áreas donde su presencia se ha visto amenazada”, detalló la experta.
La biodiversidad misionera, rica y única en su composición, se ve amenazada por diversos factores, incluido el riesgo de extinción de especies emblemáticas. La preservación de estos primates no solo representa la conservación de especies particulares, sino también la salvaguardia de ecosistemas cruciales para la biodiversidad regional.
La Fundación Neotropical Primate Conservation Argentina destaca la importancia vital de un enfoque integral y a largo plazo. Estos son fundamentales para garantizar el equilibrio y la coexistencia armoniosa entre la vida silvestre y la comunidad local.
