Los pepinillos son ideales para personas hipertensas. Con este nuevo producto, la cooperativa responde a la demanda de sus clientes. Tiene un sabor distinto porque está condimentado con otras especias.
La Cooperativa Flor de Jardín dio un paso estratégico en la diversificación de su oferta con el lanzamiento de un producto innovador. Después de dos años de desarrollo y pruebas, presentaron al mercado un pepinillo formulado para personas hipertensas o con otros problemas de salud. El producto es bajo en sodio.
Este nuevo pepinillo se obtiene tras un cuidadoso proceso de elaboración, para reducir de manera significativa la cantidad de sodio sin sacrificar su sabor. Para lograrlo, se recurrió a una combinación precisa de condimentos naturales como laurel, mostaza y pimienta. Esas características garantizan un perfil de sabor equilibrado y una alternativa amigable para quienes necesitan controlar su presión arterial.
Una cooperativa en expansión en el mercado
El gerente comercial de la cooperativa, Ivan Revinski, comentó que los principales productos que comercializan son el pepino, el choclito y el pickle, son los de mayor rotación. “Trabajamos con mucho volumen y en todo el país. Nos conocen mucho en el nordeste, en la Mesopotamia argentina y nos expandimos más hacia el sur del país en estos últimos tiempos”, detalló.
El gerente destacó el reciente lanzamiento, al mercado, de pepinillos bajos en sodio. “Nuestros clientes los pedían y entonces hicimos una línea nueva de eso”, resaltó.
Pepinillos con un rico sabor y saludables
El director de producción de la cooperativa, Víctor Scappini, indicó que con el nuevo producto disminuyeron al máximo el sodio. De esta forma, la persona hipertensa o con problemas de salud puede consumirlo. También cambiaron la composición del preparado, agregaron mostaza, laurel y pimienta para darle un sabor distinto.
“Trabajamos con esto varios años para obtener un buen producto y que pueda ser consumido”, enfatizó. Así consiguieron un nuevo producto natural de Flor de Jardín.
Una marca con 50 años de trayectoria
La Cooperativa Flor de Jardín se conformó en Jardín América en 1973, con la visión de inmigrantes en busca de desarrollo. Los fundadores comenzaron con un secadero de yerba mate y ahora producen diversos productos bajo su marca reconocida. Con el paso de los años, la cooperativa creció con nuevos socios, proyectos como almidón de mandioca y un Instituto Agrotécnico.
