Las chacras de Misiones suman tecnología de avanzada hacia una producción sustentable, con fuerte eje en el cuidado ambiental. Por ello, los productores depositan la mirada sobre los innovadores equipamientos que suman herramientas vitales para enriquecer la producción.
Entrevistado por el programa Agro Tech de Canal Doce, el productor Jonathan Valke, del paraje El Progreso en Colonia Aurora, contó sobre el dispositivo utilizado para controlar la humedad de las plantaciones. “El humedimetro es un sistema de medición de humedad de materia prima, en este caso, de maíz“, indicó.
Con la búsqueda de parámetros aceptables en el maíz, el objetivo es “que no nos llegue a levantar temperatura en los silos“. De esa manera, el equipo evita la fermentación del producto.
Al mostrar el funcionamiento de la tecnología del humedimetro, detalló que “es bastante delicado. La medida tiene que ser lo más exacta posible“.
Aclaró que “en los casos en que la humedad es muy elevada, al moler el maíz y formular el alimento, genera una fermentación que deriva en que se arruine el alimento, por una toxina que produce daño en los animales”.
Cabe recordar que el humedimetro portátil es una herramienta básica para todos los agricultores y ganaderos que mide con exactitud la humedad de granos y semillas.
Tecnología y buenas prácticas para un agro más responsable
Si bien los humedímetros no son una tecnología nueva en el ámbito agropecuario, lo que es innovador en el contexto de Misiones es la incorporación de estos equipos en chacras locales como parte de una estrategia más amplia hacia una producción agroecológica y sustentable. Su uso se enmarca dentro de un proceso de modernización tecnológica y buenas prácticas agrícolas que buscan mejorar la calidad de los forrajes y granos, optimizar la alimentación animal y reducir el impacto ambiental.
En este aspecto, las chacras de Misiones se caracterizan por el auge de la multiproducción y el cuidado ambiental enfocado en la sustentabilidad. Así, miles de hectáreas son atravesadas por la diversificación de los cultivos. Esto enriquece al ecosistema, en gran parte por las buenas prácticas agroecológicas en tándem, aprovechando las bondades del suelo misionero. Como resultado, la producción abastece a las familias productoras que también nutren de mercaderías a los mercados locales y las ferias francas.
