El Pumita Fernando Martínez (18-0/ 9 KO) volvió a rugir en Japón. Ganó por decisión unánime y logró defender con éxito su título de la AMB (Asociación Mundial de Boxeo). Así retuvo la corona ante el experimentado japonés Kazuto Ioka (31-3, 16 KO), a quien le había arrebatado el cetro supermosca hace tan solo diez meses.
El púgil argentino sufrió una dramática caída pero se impuso de forma unánime en la decisión de los jueces. Las tarjetas fueron: 115-112, 117-110 y 114-113. La pelea, a modo de revancha, tuvo lugar en el Ota-City General Gymnasium de Tokio.

El combate fue mucho más cerrado que el primero, que había sido en julio de 2024. Ambos plantearon una pelea entre la media y la corta distancia. El argentino llevó la iniciativa en el inicio y conectó más golpes. Mientras, el japonés respondía con golpes a las zonas blandas.
En el tercer round, Kazuto Ioka lucía mejor (trabajó muy bien con ganchos abajo), pero el Pumita conectó golpes claros sobre el final y lo hizo tambalear. El sexto asalto también fue de los mejores de Martínez: mucho más agresivo y dejó sin reacción a su rival.
El momento más dramático de la pelea llegó en el décimo round. Ioka lanzó dos golpes clarísimos de Ioka: primero con la derecha y cerró con un cross de izquierda para mandar a la lona al Pumita.
El argentino se recuperó bien de la caída y cerró bien la pelea. Finalmente, se impuso por decisión unánime de los jueces: 115-112 (Raul Caiz Sr), 117-110 (Robert Hoyle) y 114-113 (Bence Kovacs). De esta manera, defendió con éxito su título mundial super mosca AMB (es su cuarta pelea en la que defiende un cinturón).