Tras el ataque estadounidense a Irán, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas convocó a una reunión de emergencia sobre Irán para este domingo. Allí, China, Rusia y Pakistán presentaron un borrador de resolución “que exige un alto el fuego inmediato e incondicional, la protección de los civiles, el respeto del derecho internacional y el inicio de un diálogo y negociaciones”, en Medio Oriente.
El encuentro se realizó a pedido de Teherán. Es el tercero en su tipo desde el inicio del conflicto entre Israel e Irán.
El posicionamiento de China, Rusia y Pakistán lo confirmó el enviado chino ante la ONU, el embajador Fu Cong, que además condenó el ataque contra sitios nucleares iraníes. Dijo que se violó “el derecho internacional, así como la soberanía, la seguridad y la integridad territorial de Irán”, y dio “un duro golpe al régimen internacional de no proliferación nuclear”, según detalló la Agencia Ansa.
Por su parte, en un comunicado, el ministerio de Asuntos Exteriores iraní instó al Consejo de Seguridad de la ONU y al Organismo Internacional de Energía Atómica (AIEA) a “adoptar medidas urgentes y decisivas en respuesta a esta terrible violación del derecho internacional”.
“El silencio ante una agresión tan flagrante hundiría al mundo en un nivel de peligro y caos sin precedentes”, añadió.
La ONU alertó sobre “un giro peligroso” en Medio Oriente
Em tanto, el secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, advirtió sobre “otro ciclo de destrucción” y represalias tras los ataques estadounidenses contra Irán. Se trata de “giro peligroso” en la región, alertó.
“He condenado repetidamente cualquier escalada militar en Oriente Medio”, dijo el secretario general en una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU.

“La gente de la región no puede soportar otro ciclo de destrucción. Y, sin embargo, ahora corremos el riesgo de caer en un círculo de represalia tras represalia”, avisó.
El argentino Rafael Grossi pidió “máxima moderación”
El director del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), el argentino Rafael Grossi, también expresó su preocupación por el riesgo de “expansión del conflicto”, y pidió “la máxima moderación”.
“Tenemos una ventana de oportunidad para volver al diálogo y a la diplomacia. Si esa ventana se cierra, la violencia y la destrucción podrían alcanzar niveles impensables y el régimen de no proliferación nuclear tal como lo conocemos podría desmoronarse y colapsar”, expresó durante una intervención por videoconferencia ante el Consejo.
En cuanto al impacto de los ataques estadounidenses, señaló que “son visibles cráteres en el sitio de Fordo, principal lugar de enriquecimiento de uranio al 60% en Irán, lo que indica el uso por parte de Estados Unidos de municiones perforantes”.
Pero “en este momento, nadie, incluido el OIEA, está en posición de evaluar los daños subterráneos” en ese sitio, señaló.“Los ataques armados contra instalaciones nucleares nunca deberían tener lugar”, insistió, y reiteró su preocupación por los riesgos de emisiones radiactivas.
(Con información de EFE)