Falta menos de un mes para las elecciones provinciales del 8 de junio. Las encuestas revelan una fuerte tendencia de voto hacia el Frente Renovador Neo. La intención de voto alcanza el 65%. En este contexto, el analista Gustavo Córdoba señaló que no se debe trasladar el resultado de las provincias como un efecto nivel nacional. “Lo que pasa en las provincias queda en las provincias”, afirmó.
El analista aseguró que se trata de “una ley de hierro de la política argentina“. Por este motivo, “no se puede extrapolar un resultado provincial porque, si ponderamos como muy bueno el resultado de La Libertad Avanza en la capital salteña, deberíamos ponderar negativamente para el oficialismo el 13% que sacaron en Santa Fe, en la elección pasada”, indicó Córdoba.

En este sentido, señaló que se debe ser ecuánime “y decir que se votan agendas locales, agendas provinciales y liderazgos provinciales. De ninguna manera estuvo en juego ni el liderazgo de Milei, ni el plan económico de Milei, ni la situación del Gobierno nacional”, reflexionó.
Las tendencias de voto, según encuestas
Los últimos estudios ratifican una tendencia que ya se venía observando hace meses y que ahora se profundiza aún más. Un informe reciente de la consultora de Analía del Franco muestra que el oficialismo amplió su base electoral y que su campaña con el lema “Misiones nos importa” logró una fuerte conexión con el electorado. Según una encuesta difundida en forma privada entre dirigentes y asesores políticos, el Gobierno provincial habría sumado cinco puntos de apoyo en la última semana.
Cabe señalar que, por detrás del Frente Renovador, que se presenta cada vez más firme y sin competidores serios, están cuatro fuerzas políticas que, por separado, no alcanzan el 5% de intención de voto: el Partido Libertario, La Libertad Avanza, el Partido Agrario y Social (PAyS) y Unidos por el Futuro. Estas agrupaciones mantienen discursos alejados de las preocupaciones diarias de los ciudadanos y generan más ruido mediático que respaldo real.
El enfoque de los partidos
Lo que marcan las encuestas, más allá de las cifras, es una diferencia de enfoque: mientras el Frente Renovador apuesta por un mensaje que prioriza la estabilidad, el desarrollo provincial y una mirada misionerista de la política, los otros espacios ponen sus ojos en Buenos Aires, copian fórmulas ajenas o pelean por bancas que difícilmente obtendrán.

La estrategia del oficialismo es clara: enfocarse en la gestión, defender la identidad provincial y evitar las provocaciones de una oposición sin propuestas. Por ahora, le funciona. Y los números lo reflejan.
El 8 de junio, más de 900.000 misioneros estarán habilitados para votar legisladores provinciales, concejales y autoridades municipales en distintos puntos de la provincia. Con una participación que históricamente ronda el 70%, el resultado que vaticinan los sondeos parece difícil de revertir.