Hasta ahora se pensaba que las hembras de rana común no podían defenderse del apareamiento indeseado. Pero un nuevo estudio arrojó una nueva luz sobre estos anfibios.
Cuando se trata de evitar un apareamiento indeseado, las ranas hembra son capaces de fingir su propia muerte. Muchas especies de ranas, incluida la rana común, se aparean unas pocas semanas al año. Esto provoca que un grupo de machos compitan entre sí encima de las hembras y acaben aplastándolas.
Un nuevo estudio que publicó la revista Royal Society Open Science señaló que las hembras de rana común son capaces de defenderse del apareamiento indeseado. La doctora Carolin Dittrich y un grupo de investigadores del Museo Natural de Berlín, en Alemania, descubrieron que las hembras pueden desplegar una serie de mecanismos de defensa que consiste en la rotación del cuerpo e inmovilidad tónica, es decir, fingir su muerte.
Mecanismos de defensa de las ranas hembra
Hasta ahora se creía que las hembras no podían elegir defenderse de la coerción reproductiva masculina, pero este nuevo descubrimiento arrojó una alternativa sobre estos anfibios. “En lugar de ser pasivas e indefensas, descubrimos que las hembras pueden utilizar tres estrategias clave para evitar a los machos con los que no desean aparearse. Ya sea porque no están listas para reproducirse o no desean aparearse con un macho en particular”, explicó la doctora Carolin Dittrich.
Para llegar a este descubrimiento, el equipo recolectó 96 hembras y 48 machos de ranas comunes durante la temporada de reproducción. Colocó un macho y dos hembras de tamaños distintos en una caja con 5 centímetros de agua. De las ranas que participaron, un alto porcentaje se dio la vuelta cuando un macho se acercaba con intenciones de aparearse. Además, el 46% de las hembras que fueron montadas lograron escapar a través de volteretas, gruñidos y fingiendo su muerte. Pese a los resultados, la investigación señaló que aún desconocen si las ranas que fingen su muerte lo hacen de manera consciente o inconsciente.
