En un partidazo, Atlanta United le arrebató el triunfo al Inter Miami sobre el final. Las Garzas dejaron escapar dos puntos en su visita al Mercedes-Benz Stadium; Messi y Suárez ingresaron en el segundo tiempo.
Inter Miami venía de tres victorias consecutivas y estaba potenciado por el regreso estelar de Leo Messi, tras dos meses de ausencia, en el triunfo del fin de semana ante Philadelphia Union. Tata Martino, suspendido y que debió ver el partido desde la tribuna, tuvo que armar una defensa de emergencia por lesiones y suspensiones para enfrentar a su ex equipo, Atlanta United, y decidió dejar a varios de los habituales titulares en el banco de suplentes, incluidos Leo Messi y Suárez, quienes ingresaron en el 2T.
El partido arrancó con Inter Miami dueño de la pelota, pero sin profundidad, mientras su capitán y goleador, entre risas, disfrutaban del encuentro desde la comodidad del banco. David Ruiz abrió el marcador tras una gran jugada con asistencia incluida del argentino Franco Negri. Parecía una noche tranquila para las Garzas.
A los 11′ del segundo tiempo, el georgiano Saba Lobzhanidze (quien les había marcado dos tantos en el último choque en el Chase Stadium) puso el empate parcial tras un cabezazo, aprovechando la complicidad de Callender, que no pudo embolsar y terminó dejando que la pelota se colara entre sus piernas.
Pocos minutos después, Leo Campana, de tiro libre y con ayuda de la barrera, volvió a poner en ventaja a Inter Miami. Con este tanto, el atacante ecuatoriano superó a Gonzalo Higuaín y, con 30 goles, se convirtió en el máximo goleador histórico de las Garzas. Luego llegó el momento más esperado: Messi ingresó al campo y, minutos después, su amigo y cómplice en ataque, Luis Suárez, también entró. Nada hacía pensar que los tres puntos se escaparían de los dirigidos por Tata Martino, pero en el final del partido, Aleksei Miranchuk, jugador designado de Atlanta, marcó un golazo para sellar el 2-2 definitivo.
Los locales tuvieron las mejores jugadas y hasta pudieron haberse quedado con el triunfo ante un Inter Miami que terminó pidiendo la hora.
Olé.
