“Después de la quimio, el cáncer me dejó sin un pedazo de cuerpo. Me quedé sin pelo, sin una mama, sin ganas de salir de casa”. Así comienza su relato Marcela Osella, empleada pública de Posadas y mamá, al contar su historia. En medio del tratamiento, su psicóloga ya le hablaba de la reconstrucción mamaria, y aunque al principio parecía algo lejano, pronto se volvió realidad.
“La doctora me dijo que estaba en condiciones clínicas. Me derivaron directamente al área de cirugía plástica del hospital”, recuerda. Allí, el doctor Gustavo Abrile y su equipo del Hospital Madariaga le devolvieron no solo la forma, sino también la autoestima. “Pasé de un momento horrible a uno de esperanza”, resume entre lágrimas y emoción.

Un derecho garantizado en el sistema público
Lo que para muchas pacientes representa una preocupación económica, en el Hospital Madariaga se transforma en acceso sostenido gracias al Estado provincial. La cirugía reconstructiva es parte del tratamiento integral que ofrece la salud pública de Misiones. “Pensé que iba a tener que pelear, pero me dijeron: ‘esto es tu derecho’”, contó.
El procedimiento se planifica paso a paso, con entrevistas, estudios, fotos y medidas. “Hasta podés pedir que sea un poquito más grande”, bromea, con una sonrisa que condensa el alivio. “Todo fue cuidado al milímetro. Es un equipo que no tiene comparación”, enfatiza.
Lo que se ve… y lo que cambia por dentro
Marcela se emociona al hablar del después. “La reconstrucción me ayudó en la recuperación emocional. Me devolvieron lo que me faltaba”, aseguró. Hoy, con el pelo crecido y una nueva silueta, se anima a salir, organizar eventos y hablar con otras mujeres sobre su experiencia.
“La imagen no es solo cáscara. Es identidad. Cuando te devuelven eso, también te devuelven ganas de vivir”, asegura. El mensaje que transmite es claro: hay esperanza después del cáncer, y en Misiones esa esperanza se construye en quirófanos públicos, con manos humanas y profesionales.
Balance y alcance del servicio: cifras que hablan de salud
Misiones fue pionera al sancionar una Ley Provincial que establece el acceso a todo el ciclo de atención oncológica, incluida la reconstrucción mamaria. El dr. Abrile destaca que “el Madariaga es el único hospital del país con un programa propio de reconstrucción mamaria. Estamos a la par de cualquier lugar del mundo”.

Desde la habilitación del quirófano especializado en 2024, el Hospital Madariaga contabilizó más de 1.800 cirugías plásticas, con un promedio de ocho intervenciones diarias. A este volumen se suma la colaboración con el Samic de Eldorado, el Hospital de Fátima de Garupá y el Hospital Favaloro de Villa Cabello en Posadas, conformando una red que acerca la atención especializada a cada rincón de la provincia.
• El Samic de Eldorado, bajo la dirección de la Dra. Verónica Ojeda, realiza entre 7 y 8 cirugías diarias, enfocadas en quemaduras pediátricas y pacientes que requieren un abordaje multidisciplinario.
• El Hospital de Fátima y el Favaloro facilitan controles postoperatorios y cirugías menores.
• El modelo en red permite atender quemaduras, tumores de piel, reconstrucción mamaria y de miembros, diversidad de tratamientos reconstructivos y biopsias, todos coordinados con ginecología, traumatología y cirugía torácica.
En total, casi 2.000 cirugías plásticas se realizaron desde 2024 en la red pública de Misiones. Este avance no solo mejora la capacidad de respuesta ante patologías complejas; también fortalece la descentralización de servicios, apoyada por la Fundación Parque de la Salud y el Gobierno provincial.
Con historias como la de Marcela Osella y un sistema sanitario robusto, Misiones demuestra que la reconstrucción mamaria sin costo para los pacientes y de calidad es posible. La alianza entre equipos médicos y hospitales en red convierte un diagnóstico temido en una oportunidad de renacer, devolviendo a cada mujer no solo su cuerpo, sino también la esperanza de una nueva vida plena.