Fluminense confirmó su pasaje a los cuartos de final del Mundial de Clubes al vencer 2-0 a Inter, con un gol temprano de Germán Cano y otro de Hércules en tiempo de adición. El equipo brasileño se convirtió en el primer representante sudamericano en dejar fuera a un club europeo en esta edición.
La jugada decisiva llegó muy pronto. Germán Cano aprovechó un error defensivo a los tres minutos, conectó un centro de Jhon Arias y picó la pelota entre las piernas del arquero Sommer. El 1‑0 inicial puso a Fluminense al frente con inteligencia y presión alta desde el arranque.
El conjunto italiano reaccionó con velocidad. A los ocho minutos, Kristjan Asllani recibió una tarjeta amarilla por una infracción sobre Nonato. Apenas dos minutos después, un disparo de Di Marco fue desviado por el veterano arquero Fábio, que salvó el empate.
A lo largo del primer tiempo, Inter lideró la posesión y probó con centros a Lautaro Martínez y Thuram. La defensa de Fluminense se mantuvo firme, sin dar claves defensivas. Cada contra aprovechada por los locales representaba peligro.
A los 29 el segundo tanto casi llegó. Arias remató y Sommer desvió el balón hacia afuera, el lateral Samuel Xavier tuvo el rebote pero no pudo completar la jugada. Poco después, el arquero brasileño contuvo un potente disparo libre de Di Marco, evitando lo que podría haber sido el empate.
Un cruce por el balón en el final de la primera etapa encendió los ánimos. Renato Gaúcho, DT de Fluminense, chocó con Mkhitaryan y generó un tumulto entre jugadores y suplentes que el árbitro Barton logró controlar. El partido se reanudó tras el impasse.

El segundo tiempo fue intenso pero con pocas emociones. A los once minutos Cano probó desde fuera del área y rozó el segundo tanto. Más tarde, Arias lo intentó nuevamente y Sommer respondió con otra gran atajada, que mantuvo el marcador a favor de los brasileños.
Inter tuvo varias oportunidades claras para empatar, pero sus delanteros fallaron. De Vrij erró un mano a mano, y Lautaro Martínez perdió tres disparos sucesivos, uno de los cuales terminó estrellado contra el palo. Fábio, una vez más, fue figura vital para su equipo.
A los 48 minutos, el partido se definió. Hércules recibió un córner, esquivó a los defensores y disparó con zurda al segundo palo, que dejó sin chances a Sommer. El 2‑0 final selló una victoria histórica: Fluminense venció por primera vez a un europeo en octavos y avanzó en el torneo.